Recordando al poeta de la Llanura......

Se crea este Blog, con el trabajo conjunto de los hijos y familiares del Poeta de Camaguán, quien dedicó su vida, aún fuera de su terruño, al estudio e investigación de su historia, tierra y costumbres, en una constante lucha para mantener vivas sus raíces y tradiciones. Germán Fleitas Beroes, plasmó en sus libros y escritos, su voluntad y esperanza de que su obra no quedara en el olvido, pues había mucho de Venezuela en ella. Amó su país y amó el rincón de suelo en el que nació y se esforzó en sembrar la identidad nacional a través de su pluma. Por eso, hoy sus hijos y familiares, juntamos nuestros recuerdos para crear esta página en honor a un venezolano auténtico.

Damos disculpas a nuestros lectores pues nuevamente está presentando fallas el reproductor LISTENGO, lo cual impide escuchar los audios subidos en dicho programa. Trataremos de solventar a la brevedad dicho inconveniente.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Se avecina el verano, las aguas volvieron a sus cursos disminuidas considerablemente, se van secando lagunas y esteros, las especies migratorias se preparan para trasladarse a tierras más húmedas, los pajonales empiezan a amarillear y la tierra se va resquebrajando, para llegar a la máxima sequía entre los meses de marzo y abril. Incendios en la sabana ponen oscuro el paisaje. Zamuradas por doquier. Pero  después vendrá la corta primavera  que cubre todo de verde y mas allá las copiosas lluvias que traerán las inundaciones de nuevo.
Llano Venezolano, tierra de climas extremos.

SED

-¡traigo los labios resecos
Negra la cara y la manta,
Me alcanzó la tolvanera
Pasando por el quemado¡
¡Quieto…caballo alazán
Que esta muy lejos el Hato
Y se rompieron los tientos
De la totuma y el cacho.

Quiero beber y no puedo,
Este pozo hiede tanto
Que no sé si seguir viaje
O enfrentármele a lo macho.

Cuando me inclino de nuevo
Me tumban el pelo’e guama
Las alas de los zamuros,
Las patas de los chicuacos,
Pero extiendo mi pañuelo
Suavemente sobre el fango
Y empiezo a sentir divino
El liquido putrefacto
Que se pone tibiecito
Después que orina el caballo.

Otra vez cojo camino
Con una copla en los labios,
Agradecido de Dios
Que siempre mete su mano
Que soledad
Que desierto
Que rica el agua en pañuelo,
La palma, el azul del cielo
El pozo y el toro muerto.

viernes, 11 de octubre de 2013

LA FLOR NACIONAL.








Coplita

Me encargaron unas flores
y le quiero preguntar.
Digame  Ud. Tío Simón,
¿cual es la Flor Nacional.?



Respuesta

Allá en el ambiente criollo
donde el beso es un tesoro
cuando el hombre tumba el toro
muestra desde su caballo,
la cinta, la flor de mayo,
y el sombrero de cogollo.
esa es la Flor Nacional,
-una orquídea primorosa-
mas altiva que el clavel
y mas linda que la rosa,
siempre crece protegida
por otra planta amorosa
que la nutre con su savia
hasta que la ve frondosa
para que después la luzca
alguna mujer hermosa.



German Fleitas Beroes.1986

jueves, 10 de octubre de 2013

LA MAJADA DEL DIABLO.....

Esta ingeniosa variante de Florentino y el diablo, se la debemos al poeta Germán Fleitas Beroes. Digo ingeniosa pues en ella Florentino, hombre leyenda en el llano, ha envejecido. El poeta, fiel a su lugar de origen, abre el poema con una fiesta llanera con el arpa en manos del famoso José Cupertino Ríos Viña, oriundo de Camaguán, al igual que el poeta.
Florentino es recibido con asombro; es un personaje muy conocido en el llano, donde ha despertado la admiración de todos, no solamente por sus cualidades de improvisador, sino por haber vencido al diablo en un contrapunteo.
Al ser retado por uno de los presentes (El poeta pone el reto en la voz del otro gran talento de Camaguán, como lo es Pedro Pablo Molina), Florentino cuenta su vida y describe el encuentro. Y aquí es donde se hace presente, la otra particularidad del poema, pues el poeta, haciendo honor a su tierra natal, ubica la escena en el estado Guárico " junto a Cazorla, de Calabozo p´allá" , a diferencia del poema de Alberto Arvelo Torrealba, que se ubica en Barinas: " cuando esté mas hondo el río, aguárdeme en Santa Inés, que yo lo voy a buscar para cantar con usté". En este poema, Florentino supera las cualidades improvisadoras del indio, y al final, recibiendo una inspiración divina, canta las estrofas que harán desaparecer al diablo envuelto en una " llamará".

Según palabras del poeta, recogidas por uno de sus hijos,  "   Esta es una leyenda, de ese famoso hato La Rubiera que nos ha nutrido con sus consejas y con sus cuentos. Un hato que tiene mucha relación con  la ciudad de Calabozo. El poema dice: "A la memoria de los inolvidables músicos y cantadores anónimos de la llanura venezolana: Florentino Lovera (Florentino), Antonio Zárate, José Cupertino Ríos (Cupertino) y Pedro Pablo Molina, a quienes la imaginación popular deseaba reunir alguna vez"

Muchas historias giran en torno al hato La Rubiera y a los miembros de la familia Mier y Terán durante varias generaciones. La leyenda que el poeta trasmite en este poema, sin duda se refiere a la siguiente:   "Su hijo, Don Francisco Mier y Terán, " El Rubio Viejo" de los cazorlenses de hoy, tiene también su leyenda. Se cuenta que logró con artimañas diversas, apoderarse de las tierras de sus vecinos. Tampoco él perdía pleito. Los relatos lo presentan como un señor feudal, que cuidaba sus tierras con guardias armados (sus famosos "campos volantes")"...." Y también de él se dijo que había vendido su alma al diablo, con la condición que le construyera un gran corral, con su puerta cerrada. El diablo se había puesto a la labor, pero al colocar las traviesas, se le formaba la cruz, y no podía seguir. Entonces levantó con troncos de congrio un corral de palo a pique. Pero al cerrar la puerta y poner las trancas, volvía a formarse la cruz. Tuvo que desistir, y de ese modo un Rubio triunfó sobre el demonio. El nombre de la Cruz de la Rubiera, favorecía sin duda la leyenda".   Tomado de Buenas y Malas Palabras de Angel Rosenblat


El Arpa se abre camino
y cruzan por sus entrañas
como en un duelo de arañas
las manos de Cupertino.
La maraca lanza un trino,
al mismo tiempo que amarra
tres cintas en su guitarra
un viejo recién llegado
que al entrar es saludado
por los gritos de la barra.

Hay un revuelo en la sala,
el maraquero ni toca,
no hay ojo que no se asombre,
y vuelan de boca en boca
como si tuvieran alas
las sílabas de su nombre:
¡FLO....REN...TI....NO!

Indio astuto, Pedro Pablo
la punta al viejo le tira:
¡aquí dicen que es mentira
que cantaste con el diablo!....

Florentino corta en seco
la risa del mujerío
y goza escuchando el eco
cuando levanta el "tañío":


-Señoras y caballeros,
buenas noches pa empezá
arrímense al pié del arpa
que los quiero saludá.
Yo nunca he dicho mentira,
soy una historia sagrá;
y aunque tengo la garganta
por el canto maltratá,
todavía me queda un poco
de malicia y facultá.

El nombre de Florentino
me lo puso mi mamá
en homenaje al perfume
de la albahaca morá;
quedé solito en el mundo
cuando empezaba a gateá,
mi cuna fué la sabana,
mi libro la soledá,
mi padre el Cajón de Arauca
que me enseñó a caminá.

Recuerdo que estando mozo
compré una guitarra fiá,
el gusanillo del verso
me comenzó a taladrá,
me gustaban los arpegios,
me gustaba improvisá,
anduve de pueblo en pueblo
con mi guitarra terciá,
no hubo cantina en los llanos
que no me oyera triná,
y fue creciendo mi fama
hasta que una madrugá
con un negro pelo en pecho
me pusieron a cantá.

Eso fué junto a Cazorla,
de Calabozo p´allá;
el tipo que me sacaron
era faculto ´e verdá,
tenía mas letras que un libro
y la sabia administrá;
ni el mismo Jefe Civil
conocía su identidá,
era un negro dientes de oro
con la lengua colorá

AUDIO LA MAJÁ DEL DIABLO
(CON EL BOTON DERECHO, MARCAR "ABRIR ENLACE EN PESTAÑA NUEVA”)

Nos cogimos verso a verso
en una "quirpa" tramá,
yo no lo perdía de vista
ni lo dejaba pensá,
lo buscaba en la revuelta,
le cambiaba la toná,
con adjetivos y verbos
le puse una trampa armá;
me dijo desde el principio
la tabla e´multiplicá
la suma y la división
y también la de restá;
era bueno en Geografía
mejor en Urbanidá,
de Gramática sabía
mas que una niña graduá;
me habló de Sucre y Bolívar,
de Pichincha y Boyacá,
y de Cristobal Colón
desde su misma llegá

El arpa volvió tres veces
al punto de comenzá,
revueltas y mas revueltas
y los dos como si ná,
hubo un momento en que el negro
puso la cara amarrá,
buscó la rima en el aire
y no la pudo encontrá.
-Ya ése es tuyo Florentino,
me dijo una voz sagrá,
si con la pura garganta
lo quieres desparpajá,
recuérdale al pié del arpa
"aquello de la majá"....-
era Dios que me alentaba,
y la garganta cansá
me la sentí fresquecita
como palma llovizná.

Cuando el negro se repuso
me arrebató la picá,
me dijo que había traído
un parte sin novedá,
y que era mas peligroso
que una culebra encuevá.

Le respondí con aplomo
sin quitarle la mirá:
Arrímese caballero,
que le voy a recordá,
el hombre que tiene rabo
carga la lengua amarrá....
si le puso dos tranqueros
de samán a la majá,
métale las cinco trancas
que la quiero ver cerrá,
póngamele las diez cruces
de a dos en cada cruzá
yo no recibo corral
con la puerta destrancá...

El negro cambió e´color,
no me pudo contestá,
yo con la cara hacia arriba
y el con la cara agachá;
cuando le hablé de las cruces
fue tan grande la espantá,
que se llevó siete cintas
de alambre en la reculá.


Está de mas que les diga
que la gente alborotá,
clavó la rodilla en tierra
con intención de rezá;
y aquel hombre misterioso
sin quitarnos la mirá
contra el perfil de la luna
se volvió una llamará.

Era el Diablo compañeros,
esa es la pura verdá.
Yo nunca he dicho mentira,
soy una historia sagrá.

LA RUBIERA.









El poeta Fleitas Beroes, estudioso  y cultor de las tradiciones llaneras, escribió una carta dirigida a José Romero Bello, que fue colocada en el reverso de la carátula del Long Play "La Rubiera". 
Dicha carta cuenta la leyenda, tal y como la escuchó de sus padres y abuelos:


Escucha José Romero:
El nombre de este Long -Play encierra toda una época....
"   La Cruz",  hato famoso enclavado en el corazón de los llanos del Sur del Guárico, junto a Cazorla, fue fundado por uno de los primeros MIER  y TERÁN llegados a estas tierras, procedente  de allende los mares. Hombre de gran tesón, a quien llamaban familiarmente "  el rubio",  por ser éste de tez muy blanca, cabellos amarillos y ojos azules.
 
En pocos años "  La Cruz"   fue creciendo en sabana, se multiplicaron las bestias, aumentaron considerablemente las vacadas, y fueron cambiados por onzas de oro, interminables puntas de novillos que marchaban todos los años con rumbo a los mercados del centro, siguiendo ariscos el dulce sonsonete de las coplas.

Crecía aquella propiedad vertiginosamente, y crecía también el núcleo familiar, bajo la mirada paternal de don Sebastián, uno de los primeros fundadores. Y los llaneros de entonces comenzaron a llamar aquel inmenso paño de sabana: "  LA CRUZ RUBIERA"   y años después: "  LA RUBIERA", simple y llanamente, bajo cuyo nombre se hizo famoso.

De eso hace muchos años... Dos siglos. Tal vez mas....
Llegó a tener ciento sesenta (160) leguas de sabana, y es considerado por todos los llaneros , como uno de los hatos mas ricos que ha existido en Venezuela, en toda su historia.

Pero si rico  fue en hacienda, también lo fue en leyenda: Todavía se habla del "   familiar de la Rubiera", abuelo, tal vez, del famoso "   familiar de Altamira...."

Los viejos de antes contaban, en esas noches de luna y alcaravanes, que sus mayores les decían que en     "   LA RUBIERA"   fueron enterrados vivos, en los cuatro puntos cardinales del hato y por separado, un hombre, un perro, un toro y un caballo, para que nunca faltara gente, vigilancia, ganado y bestias.... También es fama que un mayordomo, en ocasión de tener " un rodeo cogido", echó una maldición: "  Ah malaya se presentara el demonio para que me haga  una "  majada"  donde encerrar  estos animales"   Le daría el alma!!!!

En la noche se presentó un indio, dientes de oro, y vino el diálogo:
-¿Para donde va, zambo?
-Voy para Apure a parar unas "  majadas"
-Fabríqueme una!
-Convenido!
El mayordomo se fue a dormir, y a la mañana siguiente, como por arte de magia, el indio tenía  la " majada"    lista.
Cuando el mayordomo le fue a pagar el trabajo, se dio cuenta de que todo estaba perfecto; pero los tranqueros no tenían las trancas pasadas.
-¿Que pasó con las trancas que no están metidas?
-Esas las meterá usted, respondió el forastero, porque yo no hago la cruz ni jugando!!!

El hombre desapareció en medio de una llamarada, un fuerte olor a azufre quedó bamboleando de monte a monte, mientras que el mayordomo, con la cara lívida de espanto, ensilló presuroso su caballo y se fue a Calabozo a confesarse con el cura. Era el Diablo....

Este famoso hato guariqueño pasó a manos del General Juan Vicente Gómez, y cuando no era ni la sombra de lo que fue, los vaqueros daban por terminados todos los años los trabajos de llano, cuando habían castrado cuatro mil (4000) toros. Cuando eso  ya el hato estaba en ruinas.... Hace pocos años esta inmensa propiedad fue dividida en hatos pequeños, y hoy solo queda de "  LA RUBIERA".... el nombre  y las leyendas.

Cruzando una vez por sus sabanas, me vino el recuerdo infantil de las consejas que me contaban mis padres y abuelos, llaneros de pura cepa, en aquellas noches guariqueñas, de " casos"   y aparecidos, cuando el perfume  de los naranjos en flor jugueteaba con los rayos de la luna sobre los tramos de los viejos corrales, cuando el monótono run-run del chinchorro, bajo el ala amorosa del caney, se confundía con el canto de los aguaitacaminos....Y escribí un corrido: "  LA MAJADA DEL DIABLO".  A lo mejor algún día te encargarás tu mismo de grabarlo

Atentamente
Germán Fleitas Beroes


A continuación se coloca el audio de "La Rubiera" de José Romero Bello y el de "La Majada del Diablo " de Germán Fleitas Beroes: 

ANIVERSARIO DEL FALLECIMIENTO DEL POETA